La felicidad es tan opuesta a la vida que, estando en ella, uno olvida que vive. Después, cuando termina, dure poco, dure mucho, queda apenas aquella impresión de un segundo.–Mario de Andrade (profeso fe más en la primera frase que la segunda)
El día en que las distinciones de género desaparezcan y no haya más un orden binario hombre/mujer, el feminismo habrá cumplido su cometido y dejará de existir.–Comentario hecho desde Brasil, vía chat , en una conferencia de Beatriz Preciado (algo así decía Pau en sus carteles de estética okupa que llenaban las paredes de aquella casa en Copilco)
La felicidad es una búsqueda, no un acto de necedad.–Oliver Davidson Vejar (dijo el firmante este martes en un café)
Este mes he dicho a varias personas que la felicidad, para ser humana, no puede durar más de dos años. O, en otras palabras, que la condición de paraíso es que sea efímero. Pero sobre todo, pienso que la felicidad es un péndulo cuya ida y vuelta debemos aprender a disfrutar sin apurarla.
A veces, creo, la felicidad tiene que ser, además de una búsqueda, un acto de necedad para imponerse sobre el mundo cuando uno lee el periódico o escucha a Calderón. O quizá, la búsqueda radica en encontrarla también en las aristas de esas realidades.
¿O será la felicidad para nosotros como la lluvia para los indios del desierto: hablamos tanto de ella porque no la conocemos?
3 comentarios:
O alguna otra cosa.
Es probable que la felicidad dure el instante que el péndulo llega al extremo. Y tal vez el resto del tiempo es una especie de resaca virtuosa de ese momento maravilloso y perfecto. La felicidad es un ideal que nos gusta perseguir y nos gusta recordar. Y para nada es una constante. Ni una sucesión de momentos de euforia. ¡Imagínate lo que sería si durante dos años sintiéramos como cuando el Chicharito le anotó a Francia! Pero la felicidad también es paz. Y con un segundo que suceda cada día, estamos del otro lado.
Oliver: Está buenísimo que pase usted por el blog, así evita que muera de muerte lenta.
Efrén: Tienes toda la razón y más.
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